Gobierno de Trump se burla de inmigrante: usa IA para recrear su arresto migratorio en una cruel parodia

La Casa Blanca ha desatado una fuerte polémica tras publicar en redes sociales una imagen generada con Inteligencia Artificial (IA) que parodia el arresto de una inmigrante. La ilustración, inspirada en el icónico estilo del estudio japonés Ghibli, muestra la detención de la mujer en un tono caricaturesco, lo que ha generado indignación entre activistas y defensores de los derechos de los migrantes.

Mientras algunos usuarios celebran la publicación por su enfoque satírico, otros la califican como una burla insensible ante una crisis humanitaria que experimentan los inmigrantes. En esta nota te comentamos todos los pormenores de este controversial acto.

Según El Mañana, la imagen en cuestión recrea el momento en que Virginia Basora-González fue detenida por agentes del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE). Para ello, el equipo de comunicación de la Casa Blanca utilizó herramientas avanzadas de IA, logrando un resultado visual al estilo de las animaciones japonesas.

Esta publicación ha avivado el debate en redes sociales, donde usuarios y figuras políticas han expresado posturas divididas. Mientras algunos respaldan el tono sarcástico de la administración de Trump, otros denuncian que trivializa la situación de los inmigrantes detenidos y deportados.

Organizaciones pro-migrantes han calificado la publicación como una "cruel parodia" que refuerza la deshumanización de los migrantes en el discurso oficial.

Basora-González fue arrestada tras haber reingresado ilegalmente a Estados Unidos, pese a haber sido deportada hace más de cuatro años debido a un presunto cargo por tráfico de fentanilo. Actualmente, enfrenta cargos por reingreso tras deportación en el Distrito Este de Pensilvania y permanece bajo custodia federal.

Su caso forma parte de la política de redadas masivas promovida por Donald Trump, quien durante su campaña presidencial prometió expulsar a inmigrantes con antecedentes penales. Sin embargo, en la práctica, la política se ha extendido a cualquier persona sin estatus migratorio, otorgando amplias facultades al ICE para llevar a cabo arrestos y deportaciones.

El mes pasado, la agencia deportó a más de 11,000 personas en operativos que también han afectado a ciudadanos estadounidenses y migrantes con trámites en curso, quienes han sido detenidos e interrogados arbitrariamente. Esta expansión de las medidas ha sido duramente criticada por defensores de los derechos humanos, quienes advierten sobre el impacto devastador de estas prácticas en la comunidad migrante.